El inspector general del condado Angelino envió una carta esta semana al Jefe Sheriff Alex Villanueva donde detalla que al menos 41 empleados del Departamento del Sheriff del condado de Los Ángeles han sido identificados como miembros de pandillas que operan en estaciones locales.
Los agentes fueron identificados a partir de las propias investigaciones de asuntos internos del Departamento del Sheriff, escribió el inspector general Max Huntsman en la carta enviada el lunes. Huntsman ha exigido que Villanueva entregue las imágenes de la cámara corporal relacionadas con esas investigaciones e instruya a los agentes para que cooperen con su oficina.
“Como saben, estas investigaciones descubrieron evidencia sustancial de una variedad de conductas relevantes para la definición de ‘pandilla de aplicación de la ley’ según el Código Penal, incluidos actos violentos contra el personal juramentado y discriminación en la membresía basada en la raza y el género”, escribió Huntsman.
Según el escrito, las investigaciones identificaron a 11 integrantes de Banditos y 30 integrantes de Verdugos. Ambos grupos presuntamente han existido durante décadas y, a lo largo de los años, han sido acusados de violencia contra otros agentes y miembros del público.
En una publicación de Facebook el martes, el Departamento del Sheriff menospreció a Huntsman y dijo que habían entregado toda la información que legalmente debían proporcionar a la oficina del inspector general.
“Este es otro intento irresponsable del señor Huntsman de desacreditar a la organización, a través de la omisión y la tergiversación”, dijeron los funcionarios en la publicación. “El momento de esta carta sugiere que el Sr. Huntsman está usando su cargo público y sus recursos para hacer campaña contra el alguacil antes de las primarias de junio”.
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